Hoy traigo una receta que, aunque parezca complicada, es bastante sencilla: un guiso delicioso de costillas de cerdo adobadas, sano, ligero y muy asequible. Solo requiere plantearla con tiempo para que las costillas queden bien adobadas.
¿En qué consiste el adobo?
Antes de ponernos con las manos en la masa, os quiero contar un poco acerca del adobo: se trata de una técnica para la conservación y el realce del aroma y el sabor de un alimento, que es lo que realmente nos interesa en esta receta. Para ello, se mantiene el alimento en crudo inmerso durante un cierto periodo de tiempo en un caldo de distintos componentes, siendo los principales pimentón, ajo, sal y vino o vinagre.
Para los que, como yo, sois de Cádiz o habéis estado allí os resultará de sobra conocido el plato típico «cazón en adobo», riquísimo. Pero el adobo no es solo para pescados, se puede utilizar para carnes, sobre todo con cerdo, que queda espectacular.
En el caso de esta receta, vamos a usar costilla de cerdo, que guisaremos en olla rápida, aunque el adobo también se puede utilizar para asarlas en el horno. En cualquier caso, quedarán superricas. Con respecto a los ingredientes del adobo, son de estar por casa, los principales: pimentón, sal, ajo y vino blanco. Si tenemos estos cuatro ingredientes, podemos elaborar un buen adobo, pero también podemos aromatizar con distintas especias, como laurel, orégano, comino… un gran abanico de posibilidades que puedes añadir a tu gusto. En nuestro caso añadiremos también pimienta blanca, comino y orégano, pero, como digo, la libertad es total y al gusto de cada uno.
Un guiso con múltiples ventajas.
Se trata de un plato de carne y patatas con mucho sabor, gracias al adobo y las especias, y muy sano, ya que solo tiene la grasa propia de la carne y la del aceite de oliva virgen extra, que, como sabemos, es una grasa saludable.
Además, es un plato asequible, como todos los que os propongo. En mi caso, he utilizado un costillar de cerdo envasado del supermercado porque me gusta escoger a mí la carne y porque, aunque viene envasada, no contiene ningún tipo de ingrediente añadido, por lo que es tan sana y natural como si compráramos la carne en la carnicería. El precio de este producto es de entre 5 y 6 € por kilogramo, dependiendo del supermercado. Con los 800 gramos de costillas de esta receta podemos obtener 5 raciones, siendo el coste total aproximado del plato de unos 7,62 €, es decir, 1,52 € por ración.
Es impresionante, pero el cálculo es muy sencillo y, si os paráis a hacerlo vosotros mismos, veréis que es real. No sabemos lo que se ahorra comiendo en casa, además de ganar en salud, pero, a partir de ahora, intentaré daros este cálculo en cada receta, para que, como yo, alucinéis cada día más.
La receta…
Vamos con la receta, que explicaré en dos partes: la primera será la elaboración del adobo y la segunda, el cocinado de las costillas una vez adobadas. Para cada una de ellas, primero os dejo un vídeo explicativo de corta duración y, a continuación, la receta completa en versión para imprimir.
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Adobo para carne.
Ingredientes:
- Carne a adobar
- 1 punta de sal
- 1 cucharadita de comino (en grano)
- 1/2 clavo de olor
- 4 dientes de ajo (pelados)
- 2 puntas de pimentón dulce
- 2 puntas de pimentón picante
- 1 cucharadita de orégano (seco)
- 3/4 de vaso de vino blanco (150 ml)
- 1/2 punta de pimienta blanca (o 5 vueltas de molinillo)
Elaboración:
- Trocear la carne para que quepa en el recipiente hermético en el que la mantendremos en adobo.
- Moler en un mortero la sal, el comino en grano y el clavo de olor.
- Añadir los ajos y machacarlos.
- Agregar el orégano, el pimentón dulce y el pimentón picante y machacar todo.
- Desleír con el vino y agregar la pimienta molida.
Notas:
- 1 «punta» equivale a 1 ml (1 cuchara de café/moka).
- 1 «cucharadita» equivale a 5 ml (1 cuchara de postre).
- Si no se quiere esperar las 48 horas para que la carne se adobe, se puede dejar solamente un par de horas, aunque la carne no tomará tanto sabor ni aroma. También se puede comprar la carne ya adobada, pero no lo aconsejo, porque el precio es mayor y los ingredientes añadidos no siempre son tan naturales y sanos como sería deseable; además, no olvidemos que el adobo es muy fácil de preparar en casa, por lo que no merece la pena perder en salud y dinero.
- Se puede utilizar diferentes tipos de carne o pescado.
- Recordad que el tipo y cantidad de especias a utilizar para el adobo son totalmente flexibles y se pueden adaptar al gusto de cada uno.

Guiso de costillas de cerdo adobadas
Ingredientes:
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 800 g de costillas de cerdo (ya adobadas)
- Líquido del adobo (según la preparación anterior)
- 4 dientes de ajo (pelados y picados)
- 1/2 cebolla (pelada y picada)
- 1 cucharadita de perejil (seco)
- 1 cucharadita de romero (seco)
- 1 cucharadita de tomillo (seco)
- 1 hoja de laurel (lavada)
- 1/2 vaso de vino blanco (100 ml)
- 1 vaso de agua (200 ml)
- 1 kg de patatas (peladas y troceadas)
- 4 puntas sal
- 1/2 punta de pimienta (blanca o negra molida) (o 5 vueltas de molinillo)
Elaboración:
- Calentar el aceite en la olla y dorar las costillas adobadas (reservando el líquido del adobo).
- Agregar el ajo y la cebolla picada y sofreír.
- Añadir las especias (perejil, romero y tomillo) y la hoja de laurel.
- Verter el líquido del adobo y «rascar» con la cuchara de madera el fondo de la olla para desglasar (recuperar los jugos que quedan adheridos en la superficie).
- Añadir el vino, el agua y las patatas troceadas y mezclar bien.
- Salpimentar, cerrar la olla y subir el fuego al máximo. Una vez que la válvula alcanza la posición 2, poner a fuego medio y cocer durante 7 minutos.
- Apagar la fuente de calor y, sin retirar la olla, dejar que la válvula baje sola sin forzarla.
Notas:
- 1 «cucharada» equivale a 15 ml (1 cuchara sopera).
- 1 «cucharadita» equivale a 5 ml (1 cuchara de postre).
- En mi caso particular, utilizo olla rápida y 7 minutos de cocción en vitrocerámica desde que la válvula alcanza la posición deseada (la 2) hasta que apago la fuente de calor, más el tiempo de despresurización (el tiempo de bajada de la válvula sin forzarla ni enfriarla aceleradamente), con lo que estaremos aprovechando el calor residual de la vitrocerámica y ahorrando energía.
- Si se utiliza olla tradicional, al añadir las patatas troceadas hay que agregar más agua hasta cubrir los ingredientes, ya que se evaporará parte del líquido durante la cocción, lo que no ocurre en la olla rápida.
- Se puede utilizar diferentes tipos de carne, pero hay que tener en cuenta si es más tierna o dura para el tiempo de cocción. Yo prefiero la carne de cerdo, que es más sana que otras carnes y que casa muy bien con el adobo.
- Recordad que el tipo y cantidad de especias a utilizar, tanto para el adobo como para el guiso, son totalmente flexibles y se pueden adaptar al gusto de cada uno.

Qué fácil y rápido.
Y qué buena pinta. Estamos oliendo el adobo desde Cádiz.
Me gusta la letra que usas, no cansa la vista!
Muchas gracias a los dos. En el momento en que estaba elaborando el adobo, el olor me transportó a mi tierra.
Si os animáis a cocinar esta receta, no dudéis en comentarme qué os ha parecido. Espero que os guste tanto como a mí.
¡Un saludo!